No se equivocó el artista Fernando Fader cuando eligió esta comarca, tan bella y verde, para construir su casa, que en la actualidad es museo.La historia dice que la construcción fue a principios del siglo XX y que los ladrillos para fabricar su estudio y la casa, hechos allí, en las serranías del departamento de Ischilín, dieron como resultado un complejo arquitectónico poco ceñido a un determinado estilo.Para llegar al lugar donde el maestro se recluyó para combatir la temible tuberculosis que lo aquejaba, hay que recorrer 38 kilómetros por camino de tierra desde la localidad de Deán Funes.Hoy en…